El pasado mes de febrero desde la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de La Aldea de San Nicolás, dirigida por Naira Navarro, se puso en marcha la ‘Campaña 2021 de retirada de plásticos de invernaderos abandonados’. El objetivo era contribuir a mejorar el paisaje del municipio y a mejorar el efecto de los microplásticos.
Más de una veintena de personas se beneficiaron de esta campaña, depositando en contenedores ubicados en la planta de transferencia municipal plásticos y mangueras, debidamente separados. En total se trasladó a un gestor autorizado casi 27 toneladas de plástico y más de 4 toneladas de manguera de riego.
En los últimos años se han articulado diversas fórmulas que poco a poco han ido mejorando la situación de los invernaderos en desuso del municipio. Por un lado, se han enviado notificaciones a los titulares recordándoles que tienen la obligación de limpiar los invernaderos una vez deja de usarse. Y, de forma paralela, se han ido poniendo en marcha campañas de recogida de dichos materiales agrícolas en la localidad.
A pesar de que ya es notable la mejora del paisaje en cuanto al efecto de los plásticos rotos, desde el Consistorio se continuará trabajando para que se siga minimizando este problema que tanto preocupa a la población, y que sin duda, además de mejorar la imagen de nuestro municipio, contribuye de forma notable a la reducción de la contaminación ambiental.
Los invernaderos en estado de abandono constituyen el principal origen de los microplásticos que terminan en el Océano tras desintegrarse por efecto del sol o el viento. Además, estos materiales acaban a menudo en el subsuelo, generando un segundo tipo de agresión al medio ambiente, a la que se une el impacto paisajístico que provocan. El viento y la lluvia los arrastran hasta las costas y su efecto se nota en la fauna marina, además del perjuicio que supone para el paisaje.