La Virgen del Carmen, patrona del barrio de La Playa, y copatrona del municipio de La Aldea de San Nicolás, se encuentra desde este sábado en su reciente reformado camarín. Dos años después de la restauración de la talla vuelve a su lugar para que pueda ser vista por vecinos y visitantes.

En 2019 se llevó a cabo la restauración de la talla, gracias a la parroquia de San Nicolás, cuenta Gabriel Rodríguez, vecino de la playa. Sin embargo, cuando fueron a colocarla en su camarín vieron que el lugar no estaba acondicionado.

“En estos dos años se quedó parado, más aún con la llegada de la pandemia de la COVID-19, pero hemos remado hacia adelante y con la colaboración y el apoyo de todos hemos podido arreglar su lugar para dejarlo oficialmente como el camarín donde permanecerá la Virgen del Carmen durante todo el año”, relata.

Jesús Valencia, vecino del municipio, fue el encargado de arreglar el lugar. En sus experiencias en diferentes viajes, principalmente a la ciudad de Sevilla, ha conocido multitud de camarines y plasmó sus ideas en la playa de La Aldea. Se hizo el tapizado de un tablón, se pintaron unos jarrones, que fueron brindado por un amigo suyo, él mismo cedió unos faroles, hizo el arreglo floral, toda la decoración y desde el Ayuntamiento se encargó la barca en la que se expone a la virgen.

“Había que darle a la Virgen del Carmen el sitio que merecía”, considera Valencia, quien espera que “sea del agrado” de vecinos y visitantes. “Ahora mismo estoy muy contento con los comentarios de la gente, con materiales, un poco de imaginación y la aportación de todos se hizo una cosa bonita”.

Gabriel Rodríguez aprovecha la ocasión para enviar un mensaje de agradecimiento a Jesús, quien “ha tenido la idea de todo”, a la parroquia por su aportación en la restauración de la talla y al Ayuntamiento aldeano por hacer posible que la virgen esté “en un lugar precioso”. “Es un rincón que demuestra la devoción por la Virgen del Carmen, que en La Aldea es mucha y fuera también”.

Además, Rodríguez recuerda que este año se celebra el 60 aniversario de la llegada de la imagen al barrio, por lo que es una inauguración más especial.