La Consejería de Obras Públicas, Transportes y Vivienda del Gobierno de Canarias, que dirige Sebastián Franquis, ha concluido hoy la perforación de los dos últimos túneles de los nueve que componen el trazado del proyecto de la segunda fase de la carretera de La Aldea, por lo tanto, todos los túneles de la obra ya están calados. Este mismo martes se ha culminado el calado del túnel 5, entre los barrancos de La Hoya y de La Palma, y el número 11, un nuevo túnel de reducida longitud que se añadió al proyecto con la obra ya iniciada para salvar la zona arqueológica de La Aulaga. En total se han excavado 8,4 kilómetros entre los nueve túneles para la circulación y las tres galerías de evacuación en caso de emergencia.
A primera hora de esta mañana, operarios de la UTE encargada de las obras han perforado con medios mecánicos las dos paredes que quedaban para culminar el calado de ambos túneles. El calado más complicado ha correspondido al túnel 5, de 400 metros de longitud, ya que, debido a la complicada orografía de la zona, la excavación se ha realizado en un solo sentido. De esta forma, el calado final se ha hecho en la propia pared del barranco. Para completar esta perforación, en los últimos metros, se han usado solo medios mecánicos para hacerla más precisa, ya que en el resto del túnel se han empleado los explosivos especiales que se han venido usando en el resto de las galerías de esta compleja obra. El nuevo túnel tiene una anchura de unos 12 metros y una altura mínima de 5,50 metros.
El último túnel del proyecto que también se ha terminado de calar hoy, es el llamado túnel 11 o de La Aulaga. Este túnel se añadió al trazado final de la carretera con la obra ya iniciada siguiendo indicaciones del Cabildo de Gran Canaria para salvar una zona de alto valor arqueológica. Es el noveno túnel del trazado de esta segunda fase de la carretera (los túneles 1 y 2 corresponden a la primera fase ya en servicio) y es el más corto de todos pues apenas alcanza los 50 metros de largo. A diferencia de los otros ocho túneles de este trazado, en este no ha sido posible usar explosivos debido a la poca altura de la montera que queda encima del túnel, por lo que se ha ejecutado en su totalidad con medios mecánicos.
Una vez realizado el calado en ambos túneles, los operarios procederán en los próximos días al desescombro y afianzamiento de las paredes de la cavidad para garantizar la estabilidad de la nueva estructura. Además, ahora comienza también la fase de excavación en mina que se prolongará varios días y que conllevará trabajos de sostenimiento del terreno a base de gunitado, es decir, la proyección de hormigón sobre las paredes de roca para conseguir una superficie uniforme y resistente sobre la que poder operar posteriormente.
Debido a la accidentada orografía de esta zona de la isla de Gran Canaria, la obra de la segunda fase de la Carretera de La Aldea presenta una gran complejidad que implicó en un primer momento, diseñar un trazado que incluía la construcción de ocho túneles, dos viaductos y tres enlaces. Con las modificaciones introducidas al proyecto inicial, ahora son nueve túneles (diez si se cuenta el doble túnel de Faneque) y tres galerías de evacuación en caso de emergencia. La necesidad de estos túneles hace que el 70% del recorrido de este nuevo tramo de la carretera sea subterráneo, minimizando por tanto el impacto medioambiental en el entorno que atraviesa.
Atendiendo a razones de interés público, especialmente para garantizar la conectividad de los aldeanos, la Consejería ha programado la apertura por adelantado del doble túnel de Faneque, el más largo con 2,1 kilómetros, poniéndolo en servicio antes de la finalización total de la obra, prevista para 2025. Según las previsiones de los técnicos de la Consejería, y atendiendo a la evolución de las obras, el doble túnel podría ponerse en servicio con todas las garantías en el verano de este año.
Las obras de la segunda fase de la Carretera de La Aldea. Tramo Agaete-El Risco, se adjudicaron en febrero de 2019 por 152 millones de euros y un plazo de ejecución de 65 meses que empezaron a contar en septiembre de ese mismo año, que es cuando se pusieron en marcha las obras. El tramo Agaete-El Risco es un proyecto de 8,5 kilómetros de longitud pero que por su compleja orografía incluye la construcción de varias estructuras especiales, entre ellos ocho túneles (en el proyecto inicial), dos viaductos, un paso inferior y tres enlaces. Esta nueva vía sustituirá un trayecto de cerca de 15 kilómetros que actualmente se realiza por la GC-200, presentando graves problemas de seguridad para los usuarios. Una vez terminada esta obra, se reducirá el tiempo de conexión entre La Aldea y Agaete en tres cuartas partes, pudiendo llegar en sólo seis minutos desde Agaete a El Risco.