El alcalde de La Aldea de San Nicolás, Tomás Pérez, y el consejero de Sector Primario y Soberanía Alimentaria del Cabildo de Gran Canaria, Miguel Hidalgo, mantuvieron recientemente un encuentro en el que se abordaron diferentes cuestiones relacionadas con las necesidades del municipio.
Durante la reunión se analizaron temas relacionados con las aguas del municipio, así, se planteó la idea de tener la planta desaladora a plena producción para solventar las necesidades que existen en estos momentos. Se abordó la cuestión de la construcción del nuevo emisario submarino, que se encuentra en los primeros proyectos dentro del Convenio de Obras Hidráulicas Canarias-Estado, y se solicitaron los informes de calidad del agua de vertidos.
Con relación a este asunto, otro de los puntos tratados en la reunión fue el tema de la calidad de las aguas y la reutilización de aguas depuradas. Además, el alcalde insistió en la puesta en marcha del nuevo deposito de agua potable de Las Tabladas, una acción que se está gestionando junto a Coagrisan.
En el avance del encuentro, ambos políticos hablaron de la necesidad de construir un deposito laminador de aguas residuales para trabajar con los excesos de producción de agua que se dan cuando llueve en la entrada de la planta depuradora, un proyecto que debe incluirse dentro del plan hidrológico como nueva construcción, señala Pérez.
Se abordó el asunto relacionado con las vías agrícolas para los barrios de Tasarte -la carretera de Las Heras-, cuya construcción está prevista en el próximo año, y Tasartico -la vía que va hacia la playa-. Además, se solicitó el levantamiento de muros de gaviones en algunas zonas para contener la venida de materiales y una limpieza de choque en los barrancos, así como la problemática en el sector ganadero.
El alcalde señala que fue una reunión “muy positiva” donde se abordaron diferentes temas relacionados con la consejería dirigida por Miguel Hidalgo, quien aseguró que “va caminando” el deposito de agua potable en Las Tabladas y que se están haciendo algunas gestiones para la instalación de unas membranas en la planta desaladora.
Sobre la preocupación que existe por los materiales depositados en las avenidas de los barrancos y su arrastre en caso de lluvia, Pérez reiteró a necesidad de realizar labores de vigilancia e intervención cuando sea necesario.
Tomás Pérez recuerda que desde el propio Gobierno de Canarias se plantea la utilización de estos plásticos en tecnología para producir energía y de este modo solucionar el problema de contaminación por plásticos de los invernaderos abandonados. “Creo que debemos abordar una actuación de este tipo en los puntos más críticos que tenemos en las Islas porque no todos los municipios, ni todas las Islas tienen plásticos de invernaderos abandonados”.