Hoy fue un día doblemente especial para La Aldea de San Nicolás. Después de conocer que la presa de Siberio había rebosado, sobre las 16.15 horas de esta tarde llegaban las primeras vacunas contra la COVID-19 a la Residencia de Mayores del municipio.
Con la ilusión pintada en sus caras los y las profesionales que cada día a tienden a los mayores fueron los primeros en recibir la vacuna.
Conscientes de la necesidad de vacunarse para detener la propagación del virus, algunos de ellos reconocían que estaban nerviosos, pero eso no les impedía dar El Paso. “Yo estaba deseando que llegara este momento”, contaba una de las profesionales tras recibir la dosis.
Tras ellos comenzaron a desfilar los usuarios y usuarias del centro. La enfermera les contaba la necesidad de vacunarse para hacer desaparecer “al bicho”, que desde marzo les impide salir de la residencia.
Para la concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento, Yazmina Llarena, es “una alegría tremenda” el recibir las dosis para los mayores del municipio. “Es un paso más para dejar de lado el virus en este 2021”, afirma.